Día domingo en el TPC de Scottsdale, el argentino Emiliano Grillo arrancaba en -7, en el puesto 28, y con ganas de tener un buen cierre que lo deje más arriba.
La ronda arrancó sin muchos sobresaltos, 7 pares consecutivos, pero en golf es fundamental que llegue antes el primer birdie que el bogey, y Grillo bajaba el 8 y terminaba la ida en uno bajo par.
La vuelta del chaqueño tuvo muchos colores, sólo dos pares en sus últimos 9 hoyos…y por suerte muchos birdies. Del 10 al 13 fue probablemente el peor momento de la ronda, bogeys en el 11 y 12 lo ponían sobre par para el día (+1) y además tampoco lograba bajar el par 5 del 13.
Parecía que la ronda se le escapaba, pero Emiliano reaccióno de una forma ejemplar. No se entregó, en el 14 metió una bomba para birdie…y a partir de ahí se encendió. Bajó el par 5 del 15 y en el mítico par 3 del 16 metió otra bomba de larga distancia para el tercer birdie consecutivo.
Grillo se paraba 2 menos para el día, al tee del corto par 4 del 17, y no sacó el pie del acelerador…bomba con el drive al medio del green, para un fácil birdie con dos putts. Como si los 4 birdies fueran poco, Emiliano pegó una bomba de 320 yardas al centro del fairway en el 18, y desde allí (115 yardas al hoyo) la dejó prácticamente dada.
5 birdies consecutivos para cerrar una semana muy trabajada, en donde nunca pudo meterse en la pelea por el título, pero que gracias a su paciencia, pudo cerrar muy bien. Con este gran cierre terminó dentro del Top 20 y sumó puntos muy importantes para la Fedex y el ranking mundial.