Emiliano Grillo comenzó esta semana su torneo número 15 en la temporada, tras una muy buena semana en Puerto Rico en donde finalizó puesto 11.
El Arnold Palmer Invitational se celebra en la mítica cancha de Bay Hill, con mucha agua, rough penalizante y greenes firmes, es siempre un desafío muy interesante. Emiliano supo jugar bien allí, en el año 2017 terminó dentro del Top 10 y su juego se suele adaptar muy bien al campo.
Esta edición arrancó de la mejor forma posible, birdie al primer hoyo (comenzó por el 10) con 3 tiros perfectos; sin embargo, su ida fue muy cambiante, con muchos colores en la tarjeta: 4 bogeys y 3 birdies para cerrar +1 y dirigirse al tee del 1. Allí embocaría de lejos para un par que cambiaría el curso de la ronda y le daría el momentum que necesitaba. Grillo no venía pegando bien esos primeros 10 hoyos, acertando pocos greenes y sin dejarla cerca en sus tiros de recuperación, pero a la vuelta se prendería con birdies en el 3, 5 y 6.
Emiliano había dado vuelta la ronda de forma impecable, con paciencia y aprovechando las posibilidades que le fueron surgiendo. Lamentablemente el chaqueño cerraría con bogey al 9, para firmar un 71 (-1) que lo deja en muy buena ubicación de cara al segundo día de competencia.
Viernes en Orlando, Grillo tenía tee time al mediodía y durante la mañana se observaron scores altos, que evidenciaban las dificultades que volvían a ser protagonistas en Bay Hill. Emiliano no arrancó pegando bien, en el 1 salvó el par embocando de 4 metros, pero en el par 3 del hoyo 2 volvía a fallar el green y llegaba el primer bogey del día. Sin embargo, (como venimos repitiendo mucho durante esta temporada)…el chaqueño reaccionaba de la mejor manera, con birdies en el 3 (embocando de 6 metros) y en el 4 (metió de 4 metros).
.
Con el putter encendido, la misión del argentino era enderezar su juego de tee a green, para seguir navegando a través de una cancha que estaba castigando a todo el field. Los pares fueron valiosos durante estos primeros dos días de competencia, y la clave para escalar posiciones fue evitar los números grandes y aprovechar los pares 5.
Emiliano logró encontrar más fairways y greenes, y luego de 4 sólidos pares cerraba su ida con un bogey al hoyo 9, donde falló el green por la izquierda y se dejó un approach muy difícil. Par de cancha de ida y Grillo debía buscar algunos birdies de vuelta para meterse en la pelea del torneo.
Lamentablemente el bogey del 9 fue el primero de una racha negativa de 3 consecutivos: 9, 10 y 11 que en un abrir y cerrar de ojos hicieron que Grillo estuviera en riesgo de no superar el corte con 7 hoyos por delante.
Emiliano pudo mantener la paciencia y aunque el putter no lo acompañó en la forma esperada, terminó con un birdie al 13 y un bogey al 17, para firmar 74 golpes (+2) y pasar un nuevo corte en el PGA Tour. Esta temporada jugó 15 eventos (incluyendo el actual) y superó 12 veces el corte clasificatorio, una estadística que refleja la gran regularidad del argentino.
